- lo bueno: estar ebriamente feliz por haber hablado con él(y además por estar borracha)
- lo malo: llegar al punto de la noche en el que le volvés a declararle tu afecto via mensaje de texto repetidas veces.
- lo pésimo: recibir una llamada de tu viejo a las 5 a.m quien te dice: "dejate de emborrachar y fijate bien el destinatario, porque me enviaste TODOS los mensajes a mi, BOLUDA!"
(MALISÍMO)